O mejor dicho, falta de ella.
Regreso a este blog después de un montón de días (meses, mejor dicho) en los que ni siquiera en pensado en él... lo cual no habla excesivamente bien ni el blog ni de mi. Los propósitos de constancia que me impuse cuando lo comencé se han evaporado a la menor oportunidad.
Esta semana un buen amigo encontró esta página web y supo identificarme como su autor. Mientras hablábamos, y sobre todo después, no pude dejar de pensar que no había habido una razón para abandonarlo y que tampoco tenía que existir una razón concreta para volver a él.
Así que aquí estoy de nuevo, veamos que es lo que sucede esta vez...
Regreso a este blog después de un montón de días (meses, mejor dicho) en los que ni siquiera en pensado en él... lo cual no habla excesivamente bien ni el blog ni de mi. Los propósitos de constancia que me impuse cuando lo comencé se han evaporado a la menor oportunidad.
Esta semana un buen amigo encontró esta página web y supo identificarme como su autor. Mientras hablábamos, y sobre todo después, no pude dejar de pensar que no había habido una razón para abandonarlo y que tampoco tenía que existir una razón concreta para volver a él.
Así que aquí estoy de nuevo, veamos que es lo que sucede esta vez...
No hay comentarios:
Publicar un comentario